ÁVILA, 14 de junio
de 2016
Una enorme bandada
de buitres se encuentra asentada en esta zona de la provincia provocando daños
importantes en las explotaciones ganaderas.
La Alianza UPA-COAG de Ávila denuncia un nuevo
ataque de buitres en la provincia en las últimas horas.
En esta ocasión una explotación ganadera en el
término municipal de Robledillo ha sufrido las consecuencias del asentamiento
de una elevadísima población de estas
aves necrófagas que en esta ocasión han matado a una vaca y su ternero.
No es la primera vez que este mismo ganadero sufre
las pérdidas económicas provocadas por la fauna silvestre no solo en daños
ocasionados por buitres, sino también por las lobadas que se producen con
asiduidad en esta zona de la provincia.
La situación de alarma es tal que muchos ganaderos
se están viendo obligados a manejar el ganado de una manera conservadora sin
poder subirlo a la sierra a pastar, con el problema económico que conlleva
incrementar los costes de producción asumiendo un consumo de piensos más
elevado de lo normal en un año con buenos pastos.
La Alianza UPA-COAG reclama al Gobierno regional
que actúe de inmediato ante la elevadísima población de este tipo de aves en la
provincia. Reclamamos a la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y
León la petición expresa de que, con carácter de urgencia, desarrolle un plan
de eliminación de buitres en amplias zonas de la provincia de Ávila donde se
está evidenciando un grave problema de superpoblación de estas necrófagas.
Nuestra organización lleva alertando desde hace tiempo del peligro que
supone para la cabaña ganadera de Castilla y León la cada vez mayor frecuencia
de ataques a animales en vivo por parte de los buitres.
Solo con un
descaste de la población de estas carroñeras se podría controlar la densidad de
una especie que se ha multiplicado de forma desproporcionada en determinadas
zonas de montaña y sierra de nuestra provincia, y solo así se eliminaría el
potencial reproductor de la misma.
La Alianza UPA-COAG
recuerda a los responsables políticos el peligro que corren las explotaciones
ganaderas extensivas, sobre todo ovejas, vacas y caballos durante el parto
cuando los animales son más vulnerables, debido a la enorme población de estas
aves necrófagas que no sufren ningún tipo de depredación y que se han extendido
en número de ejemplares de una forma sorprendente.
En este sentido,
consideramos que dado que es una especie protegida, al igual que el lobo, sus
efectos en la ganadería deberían estar incluidos dentro de un plan de indemnizaciones,
y por lo tanto el Gobierno regional debería asumir los daños que sufran los
ganaderos.
LA ALIANZA UPA-COAG
considera necesario que, aparte de habilitar más espacios para alimentarlos, es
el momento de actuar desde la Administración regional porque también los
buitres, como lo están haciendo los lobos, siguen generando muchas pérdidas
económicas en explotaciones ganaderas de
la provincia.