Ávila, 9 de septiembre de 2011
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LA
ALIANZA POR LA UNIDAD DEL CAMPO DE ÁVILA, con UPA y COAG al frente, solicitará formalmente
la próxima semana en Valladolid que se inicien las gestiones de inmediato para
aprovechar los recursos hídricos del regadío así como la balsa ya construida muy
cercana al término municipal.
La `ALIANZA POR LA UNIDAD DEL CAMPO DE ÁVILA´ que
forman las organizaciones agrarias UPA y COAG, mantendrán una reunión con la
Consejería de Agricultura en Valladolid la próxima semana, en la que pediremos
al Gobierno regional que afronte la ampliación del regadío de las Cogotas al
término municipal de San Vicente de Arévalo.
Así de rotundo ha sido el pronunciamiento de los
agricultores que asistieron ayer a la asamblea informativa que mantuvimos ambas
organizaciones agrarias, y en la que quedó de manifiesto que es el momento
idóneo para iniciar las gestiones con la Administración regional.
Teniendo en cuenta que actualmente se riegan en
torno a 6.000
hectáreas de la comarca de La Moraña, y que todos los
sectores proyectados suman una superficie de 7.500 hectáreas , es
por lo que los productores de este término municipal consideran que hay una
amplio excedente de agua, y que es viable realizar esta petición a la Junta de
Castilla y León.
Se da la circunstancia además de que San Vicente de
Arévalo cuenta con una balsa de regulación construida, por lo que parte de la
infraestructura estaría ya realizada.
Según hemos podido detectar desde LA ALIANZA POR LA
UNIDAD DEL CAMPO, los agricultores están especialmente ilusionados con esta
posibilidad de regadío público, si tenemos en cuenta las posibilidades de
futuro que supone para sus explotaciones poder beneficiarse de esta
optimización de recursos hídricos que existe
en la zona, y que incluso permitiría, como acción colateral, la recarga del
acuífero de Los Arenales y un ahorro considerable de energía eléctrica.
Aunque la viabilidad del proyecto depende
exclusivamente de la propia Administración regional, UPA y COAG consideran
única una oportunidad como ésta, ya que en dicho término municipal la modernización
del regadío supondría abandonar los sondeos, que no son competitivos por la
profundidad que tienen y por el alto coste que acarrean, y sin género de dudas permitiría
dimensionar un buen número de explotaciones agrarias de la zona.
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